Aquí está el canto de la verdad...

A Mr. Hyde;
no el de Robert Louis Stevenson,
sino al de José Donoso, alias "Lumiere"...



Para entender lo siguiente, sería necesario que primero revisran esta dirección: http://cristalesyespejos.blogspot.com/2008/07/cantemos-verdades.html

***

Cuando leí tu escrito, lo primero que se me vino a la mente, fue el hecho de contraponer mi posición esperanzadora, frente a tu presentación, poco optimista, de la condición humana.

Lo primero que quise escribir fue un alegato de defensa, para así rebatir tus cargos tan sombríos: para depresiones, nostalgias y temores, me basta y me sobra con mirarme al espejo y no encontrarme.

No pude argumentar concretamente algunas ideas; así que dejé de lado esa propuesta. Luego quise más bien, cantarte una canción de Rodríguez y no encontré una acorde a la situación.

Así que no sé qué responderte. Lamento –con todo el pesar que pueda habitar en mí- decirte que tienes razón. Los hombres son egoístas, humanamente imperfectos, inconcientes, irracionales.

Pero, como también soy un hombre –uno particularmente extraño-, poseo esos rasgos inconscientes, irracionales, necios, toscamente libidinoso, puramente torpes. Y en ellos me empecino, no pienso abandonarlos, niego su existente contraposición; dogmatizo mis creencias, como buen hombre. Idolatro a mis superiores, como buen hombre. Y me destruyo con los míos haciendo lo que quiero, como buen hombre…

Déjame -déjenme- cantar esas verdades obscenas, burdas, reales, fantásticas, libertarias, apadrinadas. Permíteme cantar esas tristes verdades del ayer, déjame llorar y sufrir por ellas, que no se me controle el tiempo de uso; que se no se me estigmatice por robármelas, por enseñárselas a quien nunca las conoció. Que no se me juzgue por reunir a diez hombres del futuro. Que no se mate a ninguno de ellos, yo soy el culpable. Sólo yo.

Basta de llantos del alma: soltemos las lágrimas. Hoy he guardado mi caja de máscaras, he hecho con ellas un banquete celestial. Acabo de lavar mi ropa de hombre viejo y solo. Acabo de limpiar mis orejas. He rasurado esa espesa selva que cubre mi agitado rostro. He cepillado mis lastimeros dientes. He rezado mis últimas oraciones, comulgado las últimas hostias: Ya es momento de partir.

Hyde, es cierto, es un sinsentido sembrar conciencia, soñar con futuro, pero aún con todo, yo quiero sembrar, yo quiero soñar. Construir puentes, alzar a los caídos, sumar a los demás; hundir al poderoso, despertar al perezoso. Trenzar banderas es mi fin, unificar razas es mi verdad, aliviar corazones, sanar ciegos, sanarme con ellos, que me curen las mujeres, que idolatremos su cuerpo y sus senos.

Hyde, fumémonos la vida, ésta puta existencia de personas reprimidas; ésta extrañeza de sonreír; ese largo andar, tan sólo por un simple, pequeño y azul espacio de libertad, de alegría.

Ya no sé que más escribir: contesta lo que quieras, total, yo sé que la ODA A MI GENERACIÓN que te recité, no ha sido en vano.

5 comentarios:

José Arroyo dijo...

Creo que hiciste bien al no responderle a la defensiva; de hecho, fuiste sincero y eso es algo que él no entiende: él no conoce la sinceridad. Además, te habla de "la verdad", cuando él no conoce la verdad. No conoce una sonrisa, no conoce la libertad, la poesía ni la alegría. Él representa el caos.

También debo decirte que a él no le has recitado nada, pues no tiene oídos. Tampoco tiene cuerpo ni identidad propia, su propia existencia es confusión.

¿Recuerdas lo que te dije aquél día? "Debo confesar que tus palabras me han emocionado", y así fue realmente. Lo que sucedió después fue sólo una consecuencia de aquella emoción "miesca" (como dice un amigo por ahí). Él se despertó al sentir aquello que describo, se despertó furioso y salió a lanzar sus ya acostumbrados (para mí) alaridos de destrucción. Para mi suerte, él es bastante cobarde, así que jamás te cruzarás con él. Siempre estará escondiéndose detrás de una pantalla y un teclado (recuerda que es misántropo).

Yo no comparto sus ideas, recuerda eso siempre.

Anónimo dijo...

extravagante ser que puede no ser , aunque siempre es. dualidad, dos,
bomba!. bomba!
EXPLOSIÓn..oh oh

Oswaldo Bolo Varela dijo...

Explosión de culturas, clarividencia de ciegos, explosión de existencias.

Bombas de fe; bombas de amor; bombas rellenas con dinamita de esperanza, gatillos de acción y mechas de conciencia...

Dualidad de pareceres, dos agnósticos creyendo en dios, dos hombres que se extrañan por el nacimiento de un elegido distanciado.

Extravagancia total...

halfing dijo...

sin palabras, quedaremos eludidos, siempre aqui y alla.
...
marcar siempre la primera pieza, no la ultima, es mas accecible.
..
cantos, emocionarme por aquellos no es cuestion de horas, ni trancursos solares,
vivir, emocionar...
vivir es emocionar.
distanciados, extrañados
distancia es extraño
nos quedara las ganas de vislumbrar algo mas alla del simple echo del saber. quedara lo vivencial.
seran hombres...solo hombres y su sombra...
...
..
:)

Andrea Karina dijo...

.. el hombre canta pero el hombre no escucha.
cantenle entonces al viento, al mar, al aliento, al sol, a todo lo que escucha pero no habla nuestro idioma, el hombre no escucha al hombre pero a veces escucha al viento, quizas éste les cuente su canción.
Suerte, tal vez es mejor decir: voz.